Tras el receso de estos días, veremos uno de los engranes menos conocidos, la transmisión ondulatoria ó armónica. En este complejo sistema se une el estudio cinético y dinámico de engranajes, la elasticidad del sistema, y el método de fabricación. Cuando pensamos en una transmisión por engranajes indiferentemente del tipo, todas ellas tienen un sincronismo generado por la relación de engrane. En el caso de una transmisión ordinaria, los dientes de las ruedas dentadas entraran en contacto siempre los mismos según la relación (En una relación 1:1, en cada vuelta se produce la coincidencia en el mismo punto). Ahora bien una transmisión ondulatoria los dientes varían el engrane según se produce el desfase armónico.
Una transmisión armónica es análoga a una trasmisión planetaria, con la diferencia del desfase y la deformación de una rueda elástica. En el diseño de la rueda elástica y la corona rígida, se suele hacer esta última con algún diente más, y la rueda elástica con diámetro algo menor. En este conjunto se coloca un generador, que puede ser de rodillos planetarios ó un rodamiento elíptico. Cuando se produce el giro del generador, se deforma la rueda elástica y entran los dientes en contacto con la corona rígida. Según gira el generador se produce el desfase entre dientes produciendo la relación de transmisión (la rueda elástica se retrasa la diferencia de dientes con la corona rígida).
Transmisión ondulatoria
Estas transmisiones producen grandes reducciones, son muy compactas y silenciosas, y tienen buen rendimiento. Pero son realmente costosas, debido a la dificultad de su fabricación. Algunos de los problemas que presentan son, el cálculo de la deformación de los dientes y de la propia rueda. Esta deformación se combina la torsión de la transmisión, la presión ejercida por el generador, y la variación térmica. Las pérdidas de par a la salida siguen un ciclo de histéresis, lo que dificulta definir el par medio de la transmisión. Por último la rueda elástica es muy difícil de fabricar, debido a su flexibilidad ya que los dientes se comportan independientemente del soporte de la rueda. Por lo que los dientes son con forma de trapecio, y estos se deforman con la corona rígida.
viernes, 11 de septiembre de 2009
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